Los patios de los centros escolares deben cumplir unos requisitos de seguridad imprescindibles, con la finalidad de evitar que los más pequeños sufran algún tipo de accidente mientras desarrollan alguna actividad o se encuentran en su tiempo de descanso y ocio.
El Departament d’Ensenyament de la Generalitat de Catalunya ha establecido una serie de pautas que deben seguir los centros educativos a la hora de diseñar estos espacios. Algunos de ellos son los siguientes:
- El patio deberá contar con una superficie pavimentada que haga la función de pista, y unas zonas de juego sin pavimentar.
- El área dedicada a la zona infantil deberá estar formada un pavimento blando de arena, y se deberá poder delimitar de la zona dedicada a los cursos de Primaria.
- Se deberá poder acceder a los lavabos sin necesidad de entrar en el propio centro escolar.
- Los patios deberán estar provistos de una fuente en cada una de las zonas, y en el área dedicada a la enseñanza del ciclo de Primaria, se ubicará una toma de agua.
Por su parte, la Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid también apuesta por realizar una serie de acciones encaminadas a mejorar la seguridad de estos recintos:
- Estas áreas deben disponer de unas zonas separadas para diferenciar juegos rápidos y lentos, a la vez que se suprimen elementos tales como las piedras, e instalar una zona de arena dedicada al juego del alumnado de menor edad.
- Los bordillos de los areneros existentes serán romos o redondeados, y se instalarán unas losetas de caucho para amortiguar las posibles caídas.
- En cuanto a los toboganes, deben ser de una sola pieza en su parte descendente y llegar a ras de suelo. También deben incorporar unas barandillas altas laterales.
En el supuesto de que las zonas de patio se utilicen periódicamente para realizar algún tipo de actividad deportiva, existe la obligación de seguir una normativa referente a la seguridad de algunos de los elementos que se encuentran presentes en el patio. La Junta de Andalucía marca, entre otras, algunas pautas a seguir:
- La pista debe permanecer rematada con un encintado perimetral que se encuentre enrasado con el resto del terreno del contorno, con la finalidad de evitar los tropiezos en esta área.
- Las canastas o las porterías tienen que estar fijadas al suelo mediante un sistema de anclajes, aunque esto conlleve el incumplimiento de las medidas reglamentarias. El criterio de seguridad siempre debe prevalecer por delante de cualquier otro aspecto.
- Siempre que se utilicen materiales metálicos, se deben aplicar las medidas necesarias para detectar posibles muestras de corrosión en los elementos.
- El pavimento debe ser homogéneo, no muy abrasivo y elástico. Además, se podrá permitir una pendiente máxima del 0,5% para evacuar las aguas.
La empresa Efebé realiza una apuesta diaria por mejorar estos espacios y adaptarlos a todas estas recomendaciones y pautas que establecen los organismos públicos. Renovar la zona de juegos mediante la incorporación de un pavimento de caucho, o disponer de unos espacios de protección solar son algunas de las medidas que se llevan a cabo para conseguir el bienestar de los más pequeños.’
Seguir estas directrices es sinónimo de vigilar por la salud y el entorno de los escolares, un aspecto vital para que desarrollen su jornada diaria con las máximas garantías de protección y seguridad.