Evitar el roce de la piel al usar un baño público es una imagen que, muy posiblemente, le será muy familiar a la mayoría de los lectores de este blog. Cuando usamos el baño de un bar, restaurante, de una gasolinera, etc., en la mayoría de los casos, evitamos sentarnos en el inodoro, ya sea usando papel higiénico en la taza o aguantando de cuclillas, conscientes de que podemos entrar en contacto con bacterias y gérmenes que nos provoquen una enfermedad infecciosa.
La Organización Mundial de la Salud asegura que la falta de higiene supone uno de los principales factores de riesgo para la adquisición de este tipo de enfermedades. Así, los baños públicos usados por centenares de personas a diario se convierten en zonas propensas a desarrollar la presencia de bacterias y virus.
En este sentido, una encuesta realizada a más de 1.000 adultos estadounidenses sobre sus experiencias de higiene en los baños públicos, constató que el 70% de ellos se han encontrado con una experiencia desagradable debido a las malas condiciones de los aseos. Entre las quejas más comunes se encuentran las malas olores, baños tapados y una apariencia sucia, en general.
Dada la evidencia, el estudio también observa que sólo 67% de las personas se lava las manos tras usar un baño público. Los expertos recomiendan habituarse a lavarse las manos tras pasar por un baño público, como medida principal para evitar las transmisión de aquellas bacterias y virus más presentes en estos aseos.
Algunas de estas bacterias y virus pueden ser:
- Escherichia coli: tipo de bacteria que vive en el intestino. Se transmite a través de las heces, por eso para evitar que la bacteria pueda propagarse es importante lavarse las manos después de ir al baño. Causa diarrea que puede incluir vómitos.
- Norovirus: grupo de virus relacionados. Se transmite a través de las heces. Este virus suele sobrevivir hasta dos semanas en superficies no porosas, incluido el váter de un baño público. Provoca fuertes diarreas.
- Streptococcus: grupo de bacterias que suelen instalarse en la garganta y causan importantes enfermedades inflamatorias. Según un informe de Cleaning & Maintenance Management, el 39% de los váteres públicos albergan este patógeno.
CONSEJO PAPELMATIC
Una higiene adecuada en los baños públicos se consigue, en general, a través de soluciones profesionales. Los contenedores higiénicos Cannon Concept, por ejemplo, presentan un diseño ideal para este fin, ya que incorporan un pedal, un cierre de seguridad y una bandeja de acero inoxidable. Todo ello evita su manipulación inadecuada y el consiguiente riesgo de infecciones cruzadas. Este sistema seguro incorpora el desinfectante de PAPELMATIC, el B.7, que inhibe todo tipo de bacterias, hongos y virus, incluidos los de Hepatitis B, Hepatitis C y el VIH, causante del SIDA. Por su parte, el dispensador de cubre asientos CleanSeat protege la tapa de WC de un solo uso. Este sistema, fabricado con papel de celulosa satinado, proporciona un servicio de gran comodidad e higiene a los usuarios de los baños públicos y previene de contagios de cualquier tipo.