Cómo elegir muebles de exterior para centros deportivos

Con la llegada de la primavera, los clubs y centros deportivos empiezan a plantearse la apertura de sus piscinas exteriores, solariums y equipamientos al aire libre. Hay que adecuar las instalaciones y adquirir los nuevos muebles que allí se utilizarán: mesas, sillas, bancos, tumbonas, etc. El mobiliario de exterior sufre la acción constante del sol, el cloro, la humedad y otros agentes que los deterioran y, por eso, hay que pensar qué materiales son los más adecuados para una buena durabilidad y facilidad de limpieza y mantenimiento.

Resina, plástico, prolipopileno, fibras naturales, madera, acero inoxidable y aluminio son algunos de los materiales que se utilizan para construir este tipo de mobiliario. Materiales con características particulares y que requieren cuidados específicos para mantener cada mueble en óptimas condiciones. Una limpieza regular durante todo el año también evitará su deterioro y mejorará su durabilidad. Veamos algunas ideas que nos ayudarán a escoger los muebles más adecuados.

· Muebles de resina y plástico. Son los que solemos encontrar en los centros deportivos. Son muy resistentes a las inclemencias del tiempo. No requieren un mantenimiento especial, sólo lavarlos con una bayeta húmeda y jabón neutro, aclararlos y secarlos con un paño. Además destacan por su practicidad, son ligeros y fáciles de recoger y apilar.

 · Muebles de aluminio. Este material no se oxida, por lo que su durabilidad es muy alta, más que el hierro o el acero. Aunque para su limpieza hay que tener en cuenta que es sensible a productos abrasivos como la lejía y los desinfectantes ácidos.

 · Muebles de acero pintado. Tienen una cierta durabilidad que puede verse afectada por los efectos de la lluvia o contacto con el agua de las piscinas en forma de óxido. Aplicarles una capa de pintura antioxidante cada 2 ó 3 años suele ser la mejor solución.

 · Muebles de acero inoxidable. Tiene resistencia excepcional a las condiciones atmosféricas, a los golpes y a las ralladuras. El cloro es uno de sus grandes enemigos, provocándole corrosión. El mejor mantenimiento es limpiar el mueble con agua y jabón neutro. El inconveniente: es el material más caro.

 · Muebles de madera. Las maderas exóticas de teca o iroco resisten los efectos del agua y del sol y exigen pocos cuidados ya que la propia resina de la madera crea una capa protectora. Utilizar un cepillo y agua jabonosa es la mejor solución para limpiar de estos muebles. Para mantener su color original basta con aplicarles una o dos veces al año una capa de aceite protector o un renovador de madera. Su acción contrarresta el efecto de los rayos del sol y la aparición de hongos.

 · Muebles de fibras naturales. Estas fibras son las que se deterioran de forma más rápida y su limpieza es muy complicada. Por estos motivos, este tipo de muebles no se suelen encontrar en las zonas deportivas.

Las inclemencias del tiempo también afectan a las colchonetas y cojines que se utilizan con estos muebles. Es importante que sus fundas sean de loneta y fáciles de limpiar. Si no son desenfundables debemos eliminar el polvo con una aspiradora, utilizar un producto de limpieza en seco o cepillar la tela con agua y jabón.

 Actualmente, las empresas que producen mobiliario de exterior buscan combinar los requerimientos más funcionales con un buen diseño y una buena selección de los materiales. Muebles con una alta durabilidad y que requieren un mantenimiento muy simple como los que distribuye el Grupo Efebé.