Hagamos del Día Mundial del Lavado de Manos un hábito los 365 días del año

In Espacios saludables, Higiene profesional, Medio ambiente by entorno saludableLeave a Comment

El 15 de octubre se celebra el Día Mundial del Lavado de Manos con el objetivo de concienciar a los ciudadanos que con tan sólo un pequeño gesto, lavando las manos con agua y jabón, se pueden salvar muchas vidas.

Este año el tema escogido es “Hacer un hábito de lavarse las manos”. Para que el lavado de manos sea eficaz, debe practicarse constantemente en momentos clave, como por ejemplo: después de ir al baño, antes de comer, antes del contacto con los alimentos, después de estornudar, etc.

Según informa Global Hand Washing, una gran parte de nuestros comportamientos del día a día se compone de hábitos. De hecho, alrededor del 45% de la conducta humana puede ser considerada habitual. Un hábito es una conducta automática que se percibe como una segunda naturaleza y que pueden ser saludables o no saludables y se desarrollan con el tiempo.

Una vez pasado el 15 de octubre, el reto es conseguir que realmente el lavado de manos se convierta en un hábito común saludable. Por ello, nos ofrecen cinco acciones a realizar Post-Día Mundial del Lavado de Manos:

  1. La práctica hace la perfección

Tras el Día Mundial del Lavado de Manos seguramente seamos muy conscientes de las prácticas de higiene. Por ello, debemos asegurarnos de que podemos mantener este comportamiento.

  1. Ser un héroe de la higiene

Debemos tomar medidas para asegurarnos de que la higiene se incluye en la agenda de la defensa de las políticas de higiene del medio ambiente y la promoción del lavado de manos en el que vivimos o trabajamos

  1. Difundir la palabra

Es clave hacer llegar a los demás la importancia del lavado de manos compartiendo lo que hemos aprendido. Para ello, puede sernos muy útil todas las herramientas y las hojas informativas que se nos han facilitado.

  1. Aprender más.

El saber no ocupa lugar. Existen decenas de informaciones que pueden ayudarnos a aprender sobre hábitos, cambios de comportamientos, cómo implementar un programa de Lavado de Manos en un colegio, una empresa, etc.

  1. Contar nuestra propia historia.

La viralización está al a orden del día. Hacer saber cómo cada uno de nosotros nos hemos concienciado o ayudas a concienciar sobre la importancia del lavado de manos.

Incrementar el conocimiento de esta práctica efectiva y económica puede ayudar a miles de ciudadanos a prevenir enfermedades y salvar vidas.

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