En la actualidad convivimos diariamente rodeados de contaminación acústica en los diferentes escenarios de nuestras vidas: en la calle, en el trabajo, en las tiendas o incluso en casa. Este fenómeno tiene un efecto diferente en niños y adultos, por eso queremos focalizar la atención en los más pequeños ya que son los más perjudicados.
Entendemos la contaminación acústica como la polución que altera las condiciones sonoras habituales de un espacio. En relación con esta cuestión, científicos y profesionales han introducido un nuevo concepto conocido como el “cocktail party effect”, entendido como la capacidad que tienen los adultos de mantener una conversación aun siendo estorbados por un nivel de ruido alto y poder filtrar un sonido que está obstaculizando el que es de principal atención.
Este aspecto puede generar una falta de concentración y de productividad que, para los niños, puede convertirse en un obstáculo para su aprendizaje. Lo que sucede con los más pequeños es que ellos se encuentran en un proceso de asimilación del lenguaje y aún les resulta más complicado entender aquello que se les está explicando si se encuentran en un ambiente ruidoso y molesto.
EL CONSEJO EFEBÉ
En Efebé atribuimos principal importancia a la salud y al cuidado de las personas de forma que creamos espacios acordes con sus valores y necesidades. Además, trabajamos para construir un clima interior con un ambiente acústico que fomente la productividad y respete las necesidades de los más pequeños.
Para poner solución a este problema, apostamos por la instalación de paneles fonoabsorbentes y materiales acústicos en las paredes y techos de estos espacios, que mejoran el ambiente acústico y a la vez también otros elementos del clima interior, como la temperatura o la humedad, con tal de beneficiar en gran medida al bienestar de los niños en las escuelas, el espacio donde pasan más tiempo en su día a día.
