La limpieza en húmedo garantiza unos mejores resultados de higiene y evita acciones como, por ejemplo, el levantamiento de polvo, que es una consecuencia directa de la limpieza en seco.
La acción de los productos detergentes, además, ayuda a prevenir la aparición de microorganismos nocivos en las superficies y acaba más fácilmente con los que ya pueda haber.
En este artículo del blog de Papelmatic destacamos las ventajas de la limpieza en húmedo frente a la limpieza en seco.